La importancia de la trazabilidad en las bodegas

La importancia de la trazabilidad en las bodegas

La industria vitivinícola es una de las más importantes de España, sin mencionar que forma parte de la identidad cultural del país. La producción y comercialización de vino constituye una actividad económica lucrativa, generadora de empleo y de valor para la población. Por ende, no extraña la necesidad de controlar al máximo cada uno de los puntos de las cadenas de distribución; y aquí se incluye la trazabilidad en las bodegas.

El principal objetivo de esta es minimizar los riesgos y aumentar la productividad, seguido por mantener los estándares de calidad. Hoy en día existen herramientas digitalizadas que pueden ayudar en todo lo que subyace esto, como nuestro software de gestión de bodegas. Pero ¿cuáles son sus ventajas? ¿Por qué es tan importante la trazabilidad en las bodegas para el sector vitivinícola en general?

¿Qué es la trazabilidad alimentaria y administrativa?

La trazabilidad alimentaria y administrativa representa la posibilidad de identificar cada una de las etapas que constituyen un proceso productivo; esto es, desde el origen de la materia prima hasta la posterior distribución que permite su llegada a manos del consumidor. Así, las empresas pueden monitorear su desarrollo y tomar acciones para solventar u optimizar siempre que sea pertinente. Algo así plantea la trazabilidad en las bodegas.

Dentro de un sistema de este tipo, los responsables tienen la posibilidad de ubicar un producto en un punto específico de la cadena de suministro. Con ello, no solo pueden analizar para garantizar que cumplen con el diseño del proceso; también pueden verificar que se cumplen los pasos posteriores en la secuencia y tiempos estipulados. Todo esto es vital porque refleja un buen funcionamiento de las instalaciones.

Siendo esta industria tan relevante en España, las empresas, que son referencia en Europa y el mundo, deben esforzarse por mantener elevados estándares de calidad. Una buena forma de lograrlo es a través de herramientas que permitan mejorar la trazabilidad en las bodegas de vino. Y con ello nos referimos desde opciones físicas como personal humano capacitado hasta software especializado.

Utilidad para las empresas

En primer lugar, la trazabilidad en las bodegas vitivinícolas es necesaria y útil por varias razones. La primera es que ayuda a identificar puntos críticos a lo largo de toda la cadena de suministro; esto, a su vez, permite detectar situaciones y plantear estrategias o acciones inmediatas para solventarlas. Es una práctica primordial puesto que cualquier falla o desperfecto en fases iniciales afectarán la calidad del producto.

La trazabilidad en las bodegas permite abordar las dificultades en las primeras etapas para mejorar la productividad general. Al tener más producto y acorde a lo prometido por la marca, las ventas también pueden fluir y, con ellas, los ingresos para la empresa. Además, implica menos contaminación y menos pérdidas de materia prima/producto en diferentes puntos de la cadena; esto también se traduce en ahorro para la empresa.

Utilidad para los consumidores

La utilidad de la trazabilidad en las bodegas también se extiende a los consumidores, como es de esperar. Aunque estos no intervienen directamente en la producción, su demanda es la que la motiva y la convierte en negocio. Y vale acotar que hoy en día al público le interesa saber si las empresas cumplen con estos pasos; muchas veces, esto puede incluso determinar sus decisiones de compra.

Existen varias razones que lo explican. Una de ellas, el interés por el respeto y cuidado por el medio ambiente. La trazabilidad en las bodegas y en diferentes niveles de la cadena puede revelar si se aplican procedimientos ecológicos; qué productos o prácticas se implementan en las plantaciones y estimar sus efectos. Fuera de ello, también atenúa la incertidumbre del tránsito y puede convertirnos en sus favoritos.

Utilidad para las autoridades

Curiosamente, las ventajas de la trazabilidad en las bodegas no se limitan a los productores y consumidores; también abarca a los reguladores del sector alimentario. Estas instituciones suelen exigir sistemas de rastreabilidad de alto estándares para mayor control de la producción y de la distribución. De este modo, también les resulta más fácil hacer inspecciones sanitarias en puntos específicos de la cadena.

La trazabilidad en las bodegas conlleva varias actividades. Entre ellas, identificar cada unidad de producción; evaluar sus condiciones; registrar los lotes enviados a cada cliente o distribuidor; y auditar regularmente para aplicar las mejoras necesarias. Todo esto podemos lograrlo más fácilmente y con mayor precisión usando un software con capacidad de automatización de los procesos de control.